En marzo debería aplicarse el impuesto a los combustibles líquidos (ICL) y al dióxido de carbono (IDC) que fue postergado en diciembre pasado. Estos impuestos impactan en los precios de las naftas y el gasoil y por ley tienen una actualización trimestral automática de acuerdo a las variaciones del índice de precios al consumidor (IPC) que mide el Indec.
En el Gobierno aún no confirmaron si habrá o no una nueva postergación. Y si los aumentos se trasladarán a los precios o serán absorbidos por las compañías petroleras. El pasado 1º de febrero, los combustibles tuvieron un aumento del 9% luego de mantener los precios congelados durante 9 meses, desde mayo de 2021.
Las actualizaciones correspondientes a los primeros tres trimestres de 2021 deberían haberse aplicado en los meses de junio, septiembre y diciembre del año pasado. Sin embargo, no se implementaron y el Gobierno las fue postergando. Según estimaciones del mercado, los impuestos actuales deberían incrementarse 37% para reflejar los valores que corresponden por ley.
“De acuerdo a lo previsto, a partir del próximo 1º de marzo debería aplicarse la actualización correspondiente al último trimestre de 2021, del 10%. Por lo que, para llevar los montos de los impuestos a los estipulados por ley deberían ser incrementados en 51%”, según un informe de la consultora Energy Consilium.
Fuente: Infobae.