La situación dramática se vivió el fin de semana cuando Santiago y Juli León, su esposa, dormían una siesta. Se incendió el lavadero de su casa pero por suerte no llegó a mayores.
El chef y su esposa se salvaron de milagro. A la tarde, mientras dormían la siesta, su lavadero se incendió. León compartió algunas imágenes que dan cuenta de cómo quedó el hogar, pero se mostró feliz y agradecida de que no hubiera pasado a mayores.
“¡Estamos sanos y salvos! ¡Estamos vivos!”, expresó. Acto seguido, relató lo ocurrido: “Jamás imaginé que alguna vez tendría que escribir algo así. Ayer a la tardecita se incendió nuestro lavadero. El motor del secarropas se quemó, empezó a prenderse fuego y siguió propagándose”.
“Nosotros dormíamos la siesta. Las chicas -por suerte- no estaban. Los vecinos gritaban y no escuchábamos nada”.
En el posteo no quiso dejar de destacar la solidaridad de los vecinos que desde el minuto uno hicieron todo lo que estaba a su alcance. También agradeció a los bomberos de la Policía Federal, a la policía y al SAME.
A modo de cierre, aseguró que siguen shockeados pero felices de estar bien: “La vida es un regalo precioso. Gracias, Universo, por dejarnos seguir acá”.