Según el investigador del sueño de la Universidad de Stanford, William Dement, el descanso es muy importante para la salud y el bienestar.
Tener un buen descanso incluye dormir en una correcta posición. Y si bien es cierto que lo que es cómodo para uno puede no serlo para otro, desde la ciencia y la medicina hay algunas consideraciones que vale tener presentes.
La mayoría de las personas prefiere dormir de lado. Para Dement, “es bueno escuchar esto, ya que es más probable que aquellos que se acuestan boca arriba no duerman bien o tengan dificultades para respirar durante la noche”.
En la mayoría de los casos, las personas se mueven bastante durante la noche. Un estudio de 664 participantes encontró que, en promedio, las personas pasan alrededor del 54% de su tiempo en la cama durmiendo de lado, alrededor del 37% boca arriba y alrededor del 7% boca abajo.
Los hombres (especialmente los menores de 35 años) tienden a estar más inquietos, con más cambios de posición y movimientos de brazos, muslos y parte superior de la espalda durante la noche.
Esto, para el especialista, “puede no ser algo malo, ya que permitir que tu cuerpo se mueva durante la noche suele ser una buena idea”.
Y tras aconsejar “no abrigarse demasiado”, Dement recomendó “darse un poco de espacio para moverse a ambos lados”. “Estar cómodo es clave. No hay investigaciones de calidad que proporcionen pruebas claras de una posición óptima para dormir -precisó-. Su edad, peso, entorno, actividades y si está embarazada, todos juegan un papel en la posición para dormir que es mejor para su cuerpo”.
Idealmente, cada persona podrá encontrar una posición que la ayude a dormir bien y que evite que se despierte con dolor.