Encontraron MUERTO a un niño de 7 años que había DESAPARECIDO junto con su padrastro

Encontraron MUERTO a un niño de 7 años que había DESAPARECIDO junto con su padrastro

Habían ido a pescar el domingo y nadie sabía nada de ambos. Continúa la búsqueda de David Cid el padrastro.

El domingo por la mañana, sucedió una tragedia en Buenos Aires que sigue sin terminar. Es que Owen Muzzopappa y la pareja de su mamá fueron a pasar el día a una tosquera ubicada en Pontevedra, partido de Merlo, donde solían ir a pescar y no regresaron.

Los buzos tácticos encontraron anoche ,lunes por la noche el cuerpo sumergido en el agua del nene de 7 años que buscaban desde el domingo en la zona de Claudio Debussy y Vega, según confirmó una fuente cercana a la investigación al portal local Oeste Noticias. En principio, trascendió que no presentaba signos de violencia a simple vista por lo que todo indica que fue víctima de un accidente.

Horas antes, los efectivos de la policía habían encontrado en medio de un rastrillaje el barbijo del menor y el DNI de su padrastro, David Cid, un hombre de 34 años que permanece desaparecido.

Ambos habían salido el domingo a las 11 de la mañana de la casa que compartían con la mamá de Owen y sus hermanos ubicada en la Avenida Bella Vista al 4900 y mantuvieron un contacto fluido con su familia hasta las 15.30, cuando se les perdió el rastro.

Con las primeras horas del día este martes se reanudarán los operativos para dar con Cid, el padrastro del chico que encontraron muerto. El hecho es investigado por el fiscal Mario Ferrario, de la UFI N°3 de Morón, y está caratulado como averiguación de las causales de muerte.

El lugar en donde fue encontrado el cuerpo de Owen esta madrugada fue bautizado por los vecinos de la zona como “La tosquera de la muerte” y, desde hace años, reclaman que sea tapada.

Por su parte, desde el municipio de Merlo insisten en la peligrosidad de estos lugares. “El ingreso a ellas está prohibido y constituyen verdaderas trampas. Tienen paredes que se cortan a pique, profundidades que superan los 10 metros y corrientes que no se aprecian en superficie, que terminan succionando a las personas que ingresan”, habían alertado en enero del 2019 desde el ejecutivo local.

En el mismo sentido, remarcaron que la vegetación del lugar atrapa incluso a quienes saben nadar, y deben enfrentar las bajas temperaturas de las aguas debido a los lagos que se forman en ellas y que, usualmente, están contaminadas con latas, hierros, metales, basura, vidrios, y demás.