MURIÓ el LADRÓN de 15 años que le disparó en la cara a un jubilado, tras un asalto
La víctima, de 66 años, se recuperaba tras recibir dos disparos en la cara, al defender a su familia de un feróz asalto.
El joven 15 años que había sido baleado junto a un cómplice tras asaltar una vivienda de la localidad bonaerense de Sáez Peña, donde hubo un tiroteo con un hombre de 66 años que también resultó herido en el rostro, murió hoy en el hospital en el que había quedado internado, informaron fuentes policiales.
Se trata de Maximiliano Barrientos, quien falleció este viernes en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Carrillo a raíz de la herida de bala que le había afectado la médula espinal.
En tanto, la víctima de la entradera, identificada como Luis Alberto Verdugo (66), continuaba recuperándose tras la operación en el Hospital por los dos disparos recibidos en la cara.
Fuentes policiales informaron a Télam que la fiscal de la causa, Marcela Costa, continuaba la investigación sobre el hecho ocurrido el martes alrededor de las 19.30 en una casa ubicada en la calle Pío Díaz al 900 de Sáenz Peña, partido de Tres de Febrero, en el noroeste del conurbano.
Todo ocurrio cuando la hija de los dueños de la propiedad había salido a dejar la basura al canasto y fue sorprendida por al menos dos asaltantes armados, que la obligaron a ingresar.
Una vez adentro de la vivienda, los delincuentes redujeron a la madre y al hermano de la joven.
En esas circunstancias, Verdugo, quien estaba en el dormitorio, salió armado al escuchar gritos y comenzó a dispararles a los asaltantes, tras lo cual se originó un breve tiroteo.
Como consecuencia del enfrentamiento, el hombre, recibió dos impactos de bala en el rostro, de un calibre chico, mientras que los ladrones también fueron heridos a balazos.
«A Luis lo ayudé a salir y lo llevamos en el auto de un vecino tapando la herida con una toalla, estaba consciente en todo momento pero con la cara desfigurada», explicó un vecino a la prensa, quien sobre el adolescente de 15 años herido añadió: «Tenía cara de nene y estaba sangrando pero verdaderamente se lo merecía, te cagan una familia de un día para el otro».
El muchacho fue detenido en el lugar tendido en la zona del garaje, mientras que su cómplice logró escapar.
Minutos después se pudo establecer que este supuesto segundo delincuente ingresó al Hospital Carrillo de Ciudadela, también con dos heridas de arma de fuego, indicaron las fuentes policiales.
Tras alertar al 911 de lo ocurrido, personal médico acudió al domicilio y luego trasladó a la víctima y al delincuente a dos centros de salud.
Si bien de manera inicial en la causa interviene la fiscal Costa de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 6 del Departamento Judicial de San Martín, por la edad de Barrientos, también se le dio intervención en el expediente al fiscal Marcelo Brocca, uno de los del Fuero Penal Juvenil del distrito.
La fiscalía no adoptó temperamento alguno contra el jubilado y le tomó declaración testimonial a toda la familia Verdugo para reunir diferentes pruebas y sumarlas a los peritajes que se realizaron en el lugar del asalto.
Los efectivos hallaron en la casa un pistola calibre .40 marca Bersa que pertenecía al dueño del inmueble, la misma utilizada para defender a su familia y con la que hirió a Barrientos, que recibió un balazo a la altura de la costilla izquierda, y un cómplice de 22, alcanzado por dos disparos en el abdomen y un roce en el pecho.
Los peritos que trabajaron tras el asalto incautaron también en el garaje de la casa un escopeta recortada que, si bien se aguardan los peritajes, aparentemente no funcionaba.
En tanto que en la cocina del domicilio donde ocurrió el tiroteo encontraron tres vainas calibre .40, que serían del arma de víctima, y una cápsula calibre .22 en la parte delantera del garaje.