Un joven de 16 años que había sido baleado murió tras agonizar cuatro meses en el hospital.

 

Un adolescente murió después de cuatro meses de agonía. Los familiares apuntan contra el nosocomio, creen que hubo negligencia médica.

La víctima permanecía internado en el Hospital Mi Pueblo desde julio. Allí, los profesionales médicos lo sometieron a distintas intervenciones y, si bien parecía que podría recuperarse, lamentablemente el joven terminó falleciendo.

El ataque al adolescente ocurrió el 8 de julio, cuando fue atacado a disparos por un sujeto en inmediaciones del Club 2 de Abril, en la calle 1134 entre 1145 y 1147, en la localidad de Ingeniero Allan. Recibió tres disparos que lo dejaron en grave estado.

«Se aguantó todo y estaba poniendo todo para salir adelante y volver a empezar, pero en el hospital no lo cuidaron», denuncian allegados al menor. «Los médicos le daban buenas noticias a la familia, pero lamentablemente por una negligencia de una enfermera lo dejaron morir», aseguran.

«Falleció el jueves 17 de noviembre porque la enfermera lo descuidó un segundo: se le tapó la traquea. Solamente tenía que aspirarlo, nada más y lo dejó morir», indicó una tía del menor, que exigió «Justicia por Matías y por que no le pase mas a nadie».

En el hecho intervino la Fiscalía N° 1 de Florencio Varela, al mando de Darío Santiago Provisionato, que caratuló los hechos como «Homicidio».